jueves, 15 de septiembre de 2011



El lamento del Vampiro

Vosotros, todos vosotros, toda
esa carne que en la calle
se apila, sois
para mí alimento,
todos esos ojos
cubiertos de legañas, como de quien no acaba
jamás de despertar, como
mirando sin ver o bien sólo por sed
de la absurda sanción de otra mirada,
todos vosotros
sois para mí alimento, y el espanto
profundo de tener como espejo
único esos ojos de vidrio, esa niebla
en que se cruzan los muertos, ese
es el precio que pago por mis alimentos.



Autor: Leopoldo María Panero


2 comentarios:

Mina Sousa dijo...

Me gustó muchisimo esta pagina, consisa y poetica. Animo para seguir escribiendo. Te dejo una invitacion para que te des una vuelta en "TArdes de olvido! es mi blognovela. Te espero!! un besotes!!!

Laura dijo...

Hola!!
Es muy bonito! :D
te espero en mi blog ^^