El soldado que bailó con la muerta (Relato)

Leyenda Popular

El soldado que bailó con la muerta

Un muchacho que estaba haciendo el servicio militar en una ciudad de pocos habitantes obtiene su primera licencia de fin de semana. Feliz, decide salir con sus compañeros. Al anochecer, junto con sus amigos concurre a un baile. Un sitio iluminado precariamente por unas velas pero donde abundaban las risas y el alcohol. Disfrutaba tranquilamente viendo bailar a las parejas. El soldado que era muy tímido permanecía sentado en un rincón. Cuando de pronto una hermosa muchacha se acerca a él y lo invita a bailar.

Era la mujer más bonita del pueblo, sus compañeros lo envidiaban. Toda la noche bailó con la hermosa jovencita. Al llegar las primeras horas de la mañana, ella se despidió prometiendo un próximo encuentro.

El soldado estaba tan interesado o mejor dicho, estaba deslumbrado con quien había sido su compañera y no quería esperar hasta el próximo baile. Por eso al día siguiente decidió ir a buscarla. Recorrió varios lugares, y habló con varias personas describiendo a la bella mujer. Nadie parecía conocerla y finalmente encontró a alguien que sí la conocía.

Lo guió hasta una casa donde vivía la madre de la jovencita. 
La madre le dijo que era imposible que su hija hubiese estado en aquel baile.  Como el soldado insistía con sus deseo de volver a verla, la mujer le pidió que la acompañara. Entonces, la anciana lo llevó hasta el cementerio, ahí descasaban los restos de su hija. En una lápida estaba la fotografía de la hermosa mujer con la que el soldado había bailado toda la noche. La chica había muerto exactamente hacía quince años, que se cumplían la misma noche del baile. 
El terror devoró el corazón del muchacho y dicen que perdió la cordura.

FIN