En el centro, Oeste y Norte de Argentina
suelen llamar “el familiar” a un ser sobrenatural que se alimenta de humanos, dando riqueza solamente a quien es su dueño.
Por lo general se cree que surge de un pacto con el diablo.
El familiar puede tener la forma de una enorme serpiente, una oveja, un puma etc.
En la provincia de Tucumán se describe al familiar como una fiera, puede encarnarse en la figura de un hombre, de una mujer, de un tigre o de un caballo. Aquel que lo posee tendrá suerte permanente a cambio de que le suministre a la fiera, todos lo años, una persona para ser devorado. La bestia solo sale de noche porque de día permanece encadenado.
En la provincia de Entre Ríos, el familiar es una víbora que los antiguos criaban y alimentaban cerca de las casas como señal de buenaventura.
En Santiago del Estero, se creía que el familiar era el diablo en persona, y que los ingenios azucareros, para enriquecer al patrón y dueño de los campos, este le entregaba cada año un obrero de su estancia.Con ese propósito al cumplirse el plazo enviaba con cualquier excusa a un obrero a los limites de sus tierras, al llegar allí de pronto quedaba todo a oscuras y desaparecía.
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