En esta sección ya antes había publicado dos leyendas de terror folkloricas argentinas. Espero que esta les guste o tal vez ya la conozcan, para mí era nueva.
Disfrutenla...
La resurrección de Loret Blackmen
Un popular cuento de terror basado en una leyenda real, titulado El Despertar que narra la resurrección de un no muerto un monstruo que fue enterrado como un cristiano para bloquear sus maléficos poderes, pero cuya resurrección fue profetizada. Concretamente, a los cien años de permanecer bajo tierra, volvería a la vida para recuperar su reino de terror. En este cuento hay una protagonista femenina: Marlene, la redactora de una revista de sucesos paranormales.
Esta joven periodista, en un rutinario rastreo por Internet, buscando historias descubrió la leyenda de Loret Blackmen, el vampiro. A menos de un día de su supuesta resurrección, la joven no pudo frenar su vocación periodística. Decidió presentarse en el lugar donde estaba enterrado el vampiro. Emocionada por la aventura en la que iba enfrascarse, convino invitar a su novio a que la acompañara. Éste, a regañadientes, aceptó el siniestro viaje, con la esperanza de que Marlene desistiera en el último momento.
De camino a la tumba de Loret Blackmen, la pareja se percató de que estaban adentrándose en un terreno yermo y abandonado, inimaginable en sus peores pesadillas. No obstante, continuaron con el viaje. Caía la tarde del día señalado, y la pareja se adentró con su coche en las profundidades de el mismísimo infierno. En una bifurcación de la abandonada carretera tomaron un sendero, que los conducía a la entrada de un pueblo, cuyo letrero de bienvenida rezaba lo siguiente:
"Bienvenido a La Purísima".
Circulaban a poca velocidad, enmudecidos ante tal espectáculo: las fachadas de las casas estaban totalmente cubiertas de polvo, en el aire se respiraba la más absoluta soledad. Sin duda, parecía que se encontraban en un pueblo fantasma. Acordaron rastrear el lugar a pie. Al llegar a la plaza, un sonido atronador, el de una campana, los asustó. El sonido provenía de la Iglesia del pueblo. Siguieron el estruendo hasta la pequeña edificación. Allí se encontraron a unos pocos habitantes que escuchaban atentamente al sacerdote, quien rezaba por el alma de los presentes, ya que un terrible suceso estaba a punto de sucederse.
Tras unos quince minutos en silencio, los pocos habitantes se marcharon en procesión hacia el cementerio. La pareja se acercó al sacerdote y permanecieron allí, expectantes.
Al caer la tarde, los testigos de la resurrección del vampiro emitían gritos de angustia y lloraban de terror. Incluso alguno imploraba a Dios que no permitiera esa atrocidad. Tras unos instantes de inusitada calma, una enorme bandada de cuervos emprendió un cruel ataque contra los habitantes del pueblo. Marlene, única superviviente, estaba petrificada por el pánico.
Finalmente, Loret Blackmen no se hizo esperar. Se levantó de su tumba, con su cuerpo putrefacto y con unas terribles ansias de chupar sangre. Tomó a Marlene como primera presa y la mordió en la yugular, recuperando las fuerzas a través de la sangre fresca. El novio de ésta, malherido, intentó atacar al vampiro, quien le atravesó al abdomen con una mano. El festín de sangre, después de varios minutos había acabado y el vampiro se retiró del lugar.
Pero no está solo. Tomó a Marlene como su compañera, y ésta camina junto a su sombra en la oscuridad de la noche.
Tras unos quince minutos en silencio, los pocos habitantes se marcharon en procesión hacia el cementerio. La pareja se acercó al sacerdote y permanecieron allí, expectantes.
Al caer la tarde, los testigos de la resurrección del vampiro emitían gritos de angustia y lloraban de terror. Incluso alguno imploraba a Dios que no permitiera esa atrocidad. Tras unos instantes de inusitada calma, una enorme bandada de cuervos emprendió un cruel ataque contra los habitantes del pueblo. Marlene, única superviviente, estaba petrificada por el pánico.
Finalmente, Loret Blackmen no se hizo esperar. Se levantó de su tumba, con su cuerpo putrefacto y con unas terribles ansias de chupar sangre. Tomó a Marlene como primera presa y la mordió en la yugular, recuperando las fuerzas a través de la sangre fresca. El novio de ésta, malherido, intentó atacar al vampiro, quien le atravesó al abdomen con una mano. El festín de sangre, después de varios minutos había acabado y el vampiro se retiró del lugar.
Pero no está solo. Tomó a Marlene como su compañera, y ésta camina junto a su sombra en la oscuridad de la noche.
3 comentarios:
Parece más un relato puntual que una leyenda urbana en sí, pero cumple.
Otros:
http://mitosdelbuenayre.blogspot.com
Gracias por comentar, Señor E. Visitaré ese link.
Hola!
He leido la leyenda,
esta interesante.
Te espero por mi blog ^^
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