Los cuentos siniestros
de Kobe Obe
“¿Nunca te han contado del hombre
devorado por su propia mascota?
Me atrevo a decir que el mismo se lo buscó; al menos, no lo compadezco de ninguna manera.”
Me atrevo a decir que el mismo se lo buscó; al menos, no lo compadezco de ninguna manera.”
Cuento el perro de Kobe Obe
Sinopsis:
Lo siniestro en el universo de Kobe Obe merodea en lo cotidiano, observa
desde atrás del lugar común, o del progreso prometedor, como al acecho. Abe
somete los valores corrientes a una mirada satírica y perspicaz que expone la
lógica siniestra que subyace en ellos.
“—Las vacas comen pasto,
ustedes comen vacas y nosotros los comemos a ustedes. ¿A quién pertenece el
pasto inicial? A nosotros, desde luego. Este gran círculo es el principio de la
naturaleza.”
Cuento: El grupo de petición
anti canibalista y los tres caballeros. Kobo Abe
Tenía ganas de un libro de relatos cortos orientales, pensé que si buscaba
algo japonés hallaría alguna antología de leyendas, que de seguro iba a
disfrutar, como he dicho en otras publicaciones escapó a los libros de Murakami
porque no me entusiasmo con sus historias. Por suerte, con este libro, me
encontré con algo muy distinto.
Aquí los protagonistas terminan enredados en
las situaciones más desafortunadas, se convierten en sus propias leyendas
urbanas. De esas leyendas urbanas raras que actualmente podrías encontrar en el
Internet. Kobo Abe me magnetizó con su forma de narrar. Libre de la poesía que
suele entremezclarse en autores asiáticos, era concreto en las escenas y se
respiraba una febril violencia en cada renglón, porque hay una furia en los
personajes tan parecida a ciertos autores de USA. ¿Estaba ante un libro japonés
pero con fuertes aires occidentales? Exacto, Kobo Abe en su estilo tiene mucho de
lo que agradaría a un asiduo lector de Stephen King. Desde el primer renglón no
puedes dejar de leer.
En esta selección de cuentos vas a
encontrarte con un sujeto que recibe una propuesta de empleo bastante macabra,
un perro atormenta a un pintor que tuvo el desatino de casarse con la dueña, un
peculiar representante sindicalista necesita un favor personal; en cada relato todos
terminan cayendo en un abismo fatídico junto con el lector.
Publicado por la editorial Eterna Cadencia, es un libro recomendado para los
que busquen gestar pesadillas.
Acerca del autor
Kobe Obe
Nació en Tokio en 1924 y falleció en la misma ciudad 1993.
Cursó medicina en la antigua Universidad Imperial de Tokio. En su juventud militó en el Partido comunista japonés, del cual fue expulsado por sus diferencias respecto a la libertad de creación y los derechos humanos en el entorno soviético. De sus obras se han publicado en español: La mujer de la arena (1962) y El rostro ajeno (1964) ambas obras premiadas y llevadas al cine. También está disponible en nuestro idioma otro conjunto de relatos: Historia de las pulgas que viajaron a la luna y otros cuentos de ficción científica.
Cursó medicina en la antigua Universidad Imperial de Tokio. En su juventud militó en el Partido comunista japonés, del cual fue expulsado por sus diferencias respecto a la libertad de creación y los derechos humanos en el entorno soviético. De sus obras se han publicado en español: La mujer de la arena (1962) y El rostro ajeno (1964) ambas obras premiadas y llevadas al cine. También está disponible en nuestro idioma otro conjunto de relatos: Historia de las pulgas que viajaron a la luna y otros cuentos de ficción científica.
La mujer de la arena o La mujer en las dunas (1964) es una demencial historia dirigida por Hiroshi Teshigahara; pude verla anteriormente y llegaba a desesperarme con las vivencias del protagonista. Alcanza un punto de
parecer ilógica, sus escenas son un retrato metafórico del fracaso ante lo inevitable, pero tiene
todo lo atrapante en su desarrollo para ser una historia fantástica.
Es tan similar a un asfixiante mal sueño, de esos donde que lo único que
deseas es despertar para poder escapar y no lo consigues.
Pueden verla completa, por ahora, en youtube y sacar sus propias conclusiones, mientras se animan a leer este particular autor.
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